Entrez, entrez a la comunité, vereis que bien os rescataré
El
tema de los rescates económicos está muy de actualidad estos días,
pero ¿realmente sabemos como funciona eso de un rescate financiero?
¿Realmente conocemos las consecuencias que eso nos
traería?
Empecemos por el principio, para poder entender la actualidad:
¿Como se financia un país?
Pues, en teoría, un país financia sus servicios públicos a través de los impuestos, claro... aunque no es exactamente así, pero para entendernos, podríamos asumir que es algo parecido a eso. Es decir, que para poder financiar la educación, la sanidad, las pensiones y demás servicios, es necesario recaudar impuestos. Lo normal, es que los paises gasten bastante más de lo que recaudan para poder pagar, no sólo el
mantenimiento de estos servicios, sino las inversiones y proyectos que se planifiquen a corto o medio plazo.
¿Y como consiguen el dinero para pagar esto, entonces? Pues muy sencillo: Los gobiernos buscan dinero en los mercados financieros mediante la emisión de deuda pública. En realidad, emitir deuda es pedir un pŕestamo que será devuelto con intereses en un plazo determinado. El gobierno organiza una subasta y adjudica su deuda al inversor que ofrece el tipo de interés más bajo... o al que tenga el dinero para prestar, que, por lo general, son los grandes conglomerados financieros; los mismos que califican la calidad de la deuda y que deciden a quién prestan su dinero y a quién tienen intención de ahogar en breve plazo...
A día de hoy, los inversores piden, para el bono a 10 años, un interés del 6.41% a España y un 1.20% a Alemania. La diferencia entre el interés del bono español y el del bono alemán, 641-120 = 521, es la famosa "prima de riesgo". ¿A que explicado así resulta más sencillo?
Bueno, pues cuando el tipo de interés que piden los inversores es demasiado alto... pongamos alrededor del 7%... No compensa emitir deuda pública porque es prácticamente imposible devolverlo en tan sólo diez años. Las deudas contraídas por Grecia, Irlanda y Portugal los abocaron a un rescate financiero cuando los intereses rondaban ése 7% del que hablamos. España podría solicitar en breve un "rescate" (ya entenderéis lo de las comillas) y pedir el ése dinero prestado al FMI, al BCE o a otros organismos internacionales.
Pero ¿es esta la única opción que nos queda? Pues no: Un país siempre puede "negarse a pagar su deuda", lo que en terminos econnómicos se llama "estar en default". Un estado también puede considerar la "reestructuración" de la deuda: por ejemplo, negociando con los inversores que la cantidad a devolver sea menor de la acordada o en un plazo más largo. El "default" tiene una gran ventaja: de un día para otro, tu deuda desaparece; y también grandes incovenientes:
1) A partir de ese momento, no puedes gastarte ni un euro más de lo que recaudes
2) Pueden pasar muchos años hasta que algún inversor vuelva a confiar en prestarte dinero
3) Un default español se llevaría por delante todo el sistema financiero europeo y los gobiernos del continente tendrían que rescatar a sus bancos.
O sea, a tomar vientos el euro que "tantas alegrías" nos ha proporcionado, y, desgraciadamente para nuestros mercados, el mercado común europeo y la europa unida, una, grande y libre... Por cierto, ahora que me acuerdo de nuestro amigo Paco. Franco fué el último en declarar en default a España en el año 1939. Cuando acabó la guerra y se encontró con la deuda contraída por el gobierno republicano, le dió un tembleque... Pero no creáis que ha sido el único, no... en España ya nos hemos hecho los suecos (aunque para estar más acorde con la actualidad, debería decir que nos hemos hecho los islandeses) en un total de trece ocasiones. TRECE. Desde que al llegar al trono, Felipe II se dió cuenta de que los metales preciosos de América no eran suficientes para pagar los intereses de la deuda contraída por su padre con los banqueros holandeses. El mismo rey volvió a declarar bancarrota en 1577 y 1597. Si tenéis interés en conocerlos todos, aquí está el enlace:
http://www.quo.es/ciencia/historia/las_quiebras_del_estado_espanol
Por cierto, que eso de hacer pagar impuestos a los nobles y la iglesia, sería de gran ayuda, de nuevo, para pagar la deuda que ahora mismo tenemos... y no es por incordiar, que conste...
Como "El Señor de los Hilillos", seguro que no se va a atrever a declarar un default y hacerles un corte de mangas a sus amigos los banqueros, exploremos la opción del rescate, que es lo que más se oye en estos momentos.
Habitualmente, es el FMI (Fondo Monetario Internacional) quien se encarga de rescatar a los paises en dificultades financieras. Quiero recordar, que el FMI no es más que un banco, no un organismo de la ONU ni las Hermanitas de la Caridad, no... es un banco muuuuyy chungo. En teoría, el FMI está financiado por los gobiernos de todo el mundo. La contribución y el poder de voto de cada país son, aproximadamente, proporcionales al tamaño de su economía. Los gobiernos con más poder en el FMI son los de EEUU (16% de los votos), Japón (6%) y Alemania (5%). ¿Por qué he puesto en cursiva lo de los gobiernos? Porque es un trola gorda... La realidad es que está controlado por los mismos conglomerados financieros que prestan el dinero a los paises. Y, claro... los resultados de los rescates son siempre acordes a los intereses de esos mismos contubernios. Sus políticas (especialmente, los condicionamientos que impone para el pago de su deuda o en otorgar nuevos préstamos) han sido severamente cuestionadas como causantes de regresiones en la distribución del ingreso y perjuicios a las políticas sociales. Algunas de las críticas más intensas han partido de Joseph Stiglitz, economista jefe del Banco Mundial de 1997 a 2000 y Premio Nobel de Economía 2001.
Los rescates de Grecia, Irlanda y Portugal están supervisados por una "troika" formada por el FMI, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo. Para lidiar con la crisis europea, la CEE creó otras dos entidades que pueden prestar dinero a los paises miembros: el EFSF (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera) y el EFSM (Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera. En el EFSF, Alemania contribuye con un 27%, Francia un 20%, Italia un 18% y España un 12%. El EFSM se apoya sobre el presupuesto de la UE, cuyos mayores contribuyentes son, por este orden, Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y España. El EFSF puede prestar hasta un límite de 440.000 millones, el EFSM hasta 60.000 millones y el FMI hasta 250.000 millones. En total, la capacidad de préstamos es de 750.000 millones de euros. Una pasta gansa... Pero... ¿cuales son las condiciones para recibir un trocito de ése pastel? Aquí viene cuando la matan:
Cuando
un gobierno emite deuda en los mercados financieros, puede gastarse
como quiera el dinero obtenido. Los inversores pueden estar más o
menos contentos (en cuyo caso, te pedirán un interés más bajo/alto
en la próxima subasta), pero no tienen un poder directo para marcar
las decisiones políticas del estado.Empecemos por el principio, para poder entender la actualidad:
¿Como se financia un país?
Pues, en teoría, un país financia sus servicios públicos a través de los impuestos, claro... aunque no es exactamente así, pero para entendernos, podríamos asumir que es algo parecido a eso. Es decir, que para poder financiar la educación, la sanidad, las pensiones y demás servicios, es necesario recaudar impuestos. Lo normal, es que los paises gasten bastante más de lo que recaudan para poder pagar, no sólo el
mantenimiento de estos servicios, sino las inversiones y proyectos que se planifiquen a corto o medio plazo.
¿Y como consiguen el dinero para pagar esto, entonces? Pues muy sencillo: Los gobiernos buscan dinero en los mercados financieros mediante la emisión de deuda pública. En realidad, emitir deuda es pedir un pŕestamo que será devuelto con intereses en un plazo determinado. El gobierno organiza una subasta y adjudica su deuda al inversor que ofrece el tipo de interés más bajo... o al que tenga el dinero para prestar, que, por lo general, son los grandes conglomerados financieros; los mismos que califican la calidad de la deuda y que deciden a quién prestan su dinero y a quién tienen intención de ahogar en breve plazo...
A día de hoy, los inversores piden, para el bono a 10 años, un interés del 6.41% a España y un 1.20% a Alemania. La diferencia entre el interés del bono español y el del bono alemán, 641-120 = 521, es la famosa "prima de riesgo". ¿A que explicado así resulta más sencillo?
Bueno, pues cuando el tipo de interés que piden los inversores es demasiado alto... pongamos alrededor del 7%... No compensa emitir deuda pública porque es prácticamente imposible devolverlo en tan sólo diez años. Las deudas contraídas por Grecia, Irlanda y Portugal los abocaron a un rescate financiero cuando los intereses rondaban ése 7% del que hablamos. España podría solicitar en breve un "rescate" (ya entenderéis lo de las comillas) y pedir el ése dinero prestado al FMI, al BCE o a otros organismos internacionales.
Pero ¿es esta la única opción que nos queda? Pues no: Un país siempre puede "negarse a pagar su deuda", lo que en terminos econnómicos se llama "estar en default". Un estado también puede considerar la "reestructuración" de la deuda: por ejemplo, negociando con los inversores que la cantidad a devolver sea menor de la acordada o en un plazo más largo. El "default" tiene una gran ventaja: de un día para otro, tu deuda desaparece; y también grandes incovenientes:
1) A partir de ese momento, no puedes gastarte ni un euro más de lo que recaudes
2) Pueden pasar muchos años hasta que algún inversor vuelva a confiar en prestarte dinero
3) Un default español se llevaría por delante todo el sistema financiero europeo y los gobiernos del continente tendrían que rescatar a sus bancos.
O sea, a tomar vientos el euro que "tantas alegrías" nos ha proporcionado, y, desgraciadamente para nuestros mercados, el mercado común europeo y la europa unida, una, grande y libre... Por cierto, ahora que me acuerdo de nuestro amigo Paco. Franco fué el último en declarar en default a España en el año 1939. Cuando acabó la guerra y se encontró con la deuda contraída por el gobierno republicano, le dió un tembleque... Pero no creáis que ha sido el único, no... en España ya nos hemos hecho los suecos (aunque para estar más acorde con la actualidad, debería decir que nos hemos hecho los islandeses) en un total de trece ocasiones. TRECE. Desde que al llegar al trono, Felipe II se dió cuenta de que los metales preciosos de América no eran suficientes para pagar los intereses de la deuda contraída por su padre con los banqueros holandeses. El mismo rey volvió a declarar bancarrota en 1577 y 1597. Si tenéis interés en conocerlos todos, aquí está el enlace:
http://www.quo.es/ciencia/historia/las_quiebras_del_estado_espanol
Por cierto, que eso de hacer pagar impuestos a los nobles y la iglesia, sería de gran ayuda, de nuevo, para pagar la deuda que ahora mismo tenemos... y no es por incordiar, que conste...
Como "El Señor de los Hilillos", seguro que no se va a atrever a declarar un default y hacerles un corte de mangas a sus amigos los banqueros, exploremos la opción del rescate, que es lo que más se oye en estos momentos.
Habitualmente, es el FMI (Fondo Monetario Internacional) quien se encarga de rescatar a los paises en dificultades financieras. Quiero recordar, que el FMI no es más que un banco, no un organismo de la ONU ni las Hermanitas de la Caridad, no... es un banco muuuuyy chungo. En teoría, el FMI está financiado por los gobiernos de todo el mundo. La contribución y el poder de voto de cada país son, aproximadamente, proporcionales al tamaño de su economía. Los gobiernos con más poder en el FMI son los de EEUU (16% de los votos), Japón (6%) y Alemania (5%). ¿Por qué he puesto en cursiva lo de los gobiernos? Porque es un trola gorda... La realidad es que está controlado por los mismos conglomerados financieros que prestan el dinero a los paises. Y, claro... los resultados de los rescates son siempre acordes a los intereses de esos mismos contubernios. Sus políticas (especialmente, los condicionamientos que impone para el pago de su deuda o en otorgar nuevos préstamos) han sido severamente cuestionadas como causantes de regresiones en la distribución del ingreso y perjuicios a las políticas sociales. Algunas de las críticas más intensas han partido de Joseph Stiglitz, economista jefe del Banco Mundial de 1997 a 2000 y Premio Nobel de Economía 2001.
Los rescates de Grecia, Irlanda y Portugal están supervisados por una "troika" formada por el FMI, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo. Para lidiar con la crisis europea, la CEE creó otras dos entidades que pueden prestar dinero a los paises miembros: el EFSF (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera) y el EFSM (Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera. En el EFSF, Alemania contribuye con un 27%, Francia un 20%, Italia un 18% y España un 12%. El EFSM se apoya sobre el presupuesto de la UE, cuyos mayores contribuyentes son, por este orden, Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y España. El EFSF puede prestar hasta un límite de 440.000 millones, el EFSM hasta 60.000 millones y el FMI hasta 250.000 millones. En total, la capacidad de préstamos es de 750.000 millones de euros. Una pasta gansa... Pero... ¿cuales son las condiciones para recibir un trocito de ése pastel? Aquí viene cuando la matan:
Por contra, los préstamos del FMI/troika están condicionados a que el gobierno que los recibe implemente reformas muy concretas. La troika presta dinero "por tramos": según el gobierno va adoptando las medidas que ellos imponen, van soltando el dinero. Y si el gobierno no cumple, cortan la financiación y el país se va al carajo. Un país intervenido pierde su soberanía para tomar decisiones políticas.
Ejemplo: Grecia. ¿Cuales fueron las condiciones que le impusieron a Grecia?
Cambiar la constitución para que el pago de la deuda tenga prioridad sobre cualquier otro gasto público.
- Despido de 150.000 empleados públicos en dos años (teniendo en cuenta la población griega, esto correspondería a 700.000 en España).
- Recorte del salario mínimo desde 751 euros a 580 euros (y 510 euros para los menores de 25 años).
- Los Presupuestos tienen que ser aprobados por la troika antes de ser votados en el Parlamento.
- Supervisores de la Comisión Europea instalados permanentemente en Atenas.
- Recortes en pensiones y gasto sanitario.
- Privatización de empresas públicas.
El
rescate de Grecia esta provocando una tragedia: el desempleo se ha
duplicado, los salarios han bajado un 30% y se han disparado el
número de personas sin hogar y los suicidios.
Más
terrible aún: todo este sufrimiento humano puede resultar gratuito.
Como la economía griega se está contrayendo tan rápido, los
ingresos por impuestos se están desplomando, así que Grecia puede
acabar con el mismo porcentaje de deuda con el que comenzó.Así que mientras el Naniano sigue buscando pasta para poder enlucir el "agujerito" de Bankia, los prestamistas ya se están frotando las manos al pensar en convertir a nuestro pais, con sus turistas, sus paellas, sus toros y su Eurocopa histórica en el nuevo campo de esclavos "Uropeo".
Yo sigo queriendo ser islandés... ¿Alguien más se apunta?
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